miércoles, enero 13, 2010

Otras fuentes históricas : La supervivencia de los "blogs del pasado"


Hace dos años, en enero de 2008, se publicaba en la prensa nacional e internacional la curiosa iniciativa que había tenido Bill Lamin al publicar las cartas de su abuelo Harry Lamin, un soldado inglés que participó en la Primera Guerra Mundial. Las misivas se posteaban cronológicamente y en "tiempo real", es decir, de forma sincronizada guardando lo correspondencia de las fechas de las cartas con la de sus post, sólo que con 90 años de diferencia (WW1: Experiences of an English Soldier). Junto al éxito de la iniciativa de Lamin, se hablaba de otros blogs similares como el del Capitán Wallace Rusell, que nos trasladaba cronológicamente a la Segunda Guerra Mundial, y su diario de juventud que data de 1938 ( blog ya finalizado); el relato del Quadern Gris de Josep Plá, que se inicia en 1918 (también acabado); o incluso otras páginas que no hacen retroceder mucho más en el tiempo como es el caso de los diarios del naturalista Gilbert White, (s. XVIII), o del detallado diario de Samuel Pepys para el reinado de Jacobo II. Esta no es algo nuevo, la publicación de correspondencia privada ha sido algo habitual en épocas anteriores a la aparición de Internet, son numerosas las obras que con este carácter se publicaron durante todo el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX. La novedad reside en la gran difusión que tienen ahora estos datos a través de la red.

El motivo de este post es seguir el recorrido vital que han tenido todas estas propuesta y ver si,como se había previsto, ha aparecido una nueva tendencia en la llamada "blogosfera". Me alegra poder decir que todos ellos se han mantenido, aunque el del Capitán Wallace y el naturalista White están paralizados desde mediados de 2009. En los otros dos blogs, y a día de hoy el posteo se mantiene y la historia, sus historias, continuan desplegándose por segunda vez ante los ojos de lectores curiosos e historiadores ávidos.

Parece que el mayor éxito de esta iniciativa se ha producido con lo referente a diarios y cartas de soldados. Así, paralelamente aparecieron otros blog como el del Sargento Sam Avery, o más recientemente, en julio de 2009, y como complemento a la bitácora de Lamin, el diario de Dieter Fiezen, soldado alemán también, que se inicia en 1916, y cuyos post están traducidos en varios idiomas. Y esto sólo es una pequeña muestra de todos los que recoge una web llamada Diarywar, (en total más de 160 y en constante aumento), donde se incluyen relatos procedentes de otros conflictos bélicos como la Guerra de los Boers, la Guerra de Cuba, la Guerra de Secesión americana, la Segunda Guerra Mundial o la Guerra de Vietnam.

Ya no en tiempo real, como es el caso de la mayor parte de los blog citados, existen otras webs que han volcado en la red los diarios y la correspondencia de otros combatientes en la Primera Guerra Mundial, como Firstworldwar.com o como Greatwar.eril.net. En esta línea, pero sin la implicación directa de un testigo directo el Diario de la Guerra, cuenta día a día la evolución de los diferentes frentes de la Segunda Guerra Mundial. También está la transcripción de las cartas de Benjamín Kaplow , escritas entre 1943 y 1945 o la extensa recopilación que ha realizado History.com con el proyecto Dear Home, Letters from WWI en cuyo archivo de cartas hay incluidas transcripciones de documentos oficiales. Existen otras webs como Palo Alto Co, IA USGenWeb Project en la que estos documentos forman parte de estudios genealógicos. Además pueden consultarse proyectos oficiales como el de la Kansas State Historical Society, cronológicamente más amplios. También existen blog de este tipo con testimonios de la Guerra Civil Española, un buen ejemplo es el que recoge las cartas de Inocencio Pérez. Para leer las cartas de un soldado español en la Guerra de Cuba véase Cartas desde Santiago de Cuba.

El incremento es constante, por lo que sin lugar a dudas nos encontramos ante un movimiento bloguero muy interesante para el estudio de estas épocas, pues nos permite acercarnos a un testimonio de primera mano, lo cual supone añadir un punto de vista complementario a la documentación oficial. Ahora bien, debemos recordar que estamos ante fuentes parciales, subjetivas, ya que los autores de los textos son protagonistas directos de los mismos, esto quiere decir que para poder hacer una buena lectura y un buen uso de los mismos, siempre es recomendable el cotejo con otras fuentes. No obstante, la propuesta de estas bitácoras históricas es una muestra más de las enormes posibilidades que ofrece la red para el desarrollo complementario de las investigaciones históricas y la didáctica de la Historia.

2 comentarios:

Neila SP dijo...

Hola Esther!!

Gracias por dar a conocer esta información, ahora que estoy inmersa en fuentes documentales, este aporte va a serme de gran ayuda, gracias.

Cuídate. Besos.

Nonnullus dijo...

De nada, pero soy yo quien tengo que darte la gracias, a ti y a todos lo que siguen este pequeño blog.

El tema la verdad es que es muy interesante,y respecto a las fuentes documentales en la red espero ir poniendo las novedades que van surgiendo, acepto sugerencias.

Un abrazo.