sábado, octubre 06, 2007

Entre la ciencia y la fastinación. La imagen del monstruo.

Portentos, fenómenos, o monstruos. La eclosión científica llevó durante el siglo XVI y XVII a la contemplación de una serie de sucesos o seres, algunos reales otros fruto de la fabulación a formar parte del imaginario colectivo como maravillas naturales, caprichos o signos divinos.

Muchos de los seres fantásticos que U. Aldrovandi (1522-1605) recoge en su obra "Mosntrorum Historia" tienen su origen en una creencia popular muy arraigada y cuya génesis la encontramos en leyendas medievales y en toda una serie de alegoria del pecado, o bien recogidos en los relatos de viajeros como Marco Polo o John Mandeville. De esta suerte, estos seres fabulosos impregnan toda una mentalidad cultural alegórica en la que paulatinamente van adquiriendo otro significado, mientras que en la cultura popular permanece la superstición y la atracción hacia lo fantástico. Aldrovandi dibujó, llevado por un interés científico propio de la época, en sus páginas el bestiario más universal que el hombre europeo del momento podía imaginar. Estudio erudito el suyo en el que las malformaciones congénitas humanas, animales y vegetales se mezclan con descripciones etnográficas y seres legendarios.

Aldrovandi hace una diferenciación entre todos estos elementos pero se hace eco de las más diversas fuentes, de este modo habla de prodigios celestes, milagros, y hace referencia a toda las simbología de los emblemata.

La Monstrorum Historia es otra de las caras del auge ciéntifico de los siglos XVI y XVII que alberga un contenido mucho más amplio y complejo de lo que el tratamiento del tema o la propia temática pueden hacer pensar.

(Pinchando en la imagen puedes descargar un archivo en .PDF con algunos ejemplos)

1 comentarios:

agnes dijo...

Supongo que con la monstruología, paso lo mismo que con los tratados sobre brujeria que proliferaron en Europa. Fruto de los miedos infundidos en el pueblo convertidos en leyendas y cuentos, mezclado con la imaginación sugestionada de "eruditos" de la época.

Pero siempre desde mi punto de vista, objeto de mi curiosidad.

;)